Problemas de sueño en autismo

Problemas de sueño en autismoMuchas personas dentro del espectro autista tienen problemas para conciliar sueño y/o mantenerse dormidos. Esto puede incrementarse si existen comportamientos repetitivos los cuales pueden complicar las horas de sueño.

Los problemas de sueño figuran entre las principales preocupaciones de los familiares de las personas con autismo, sin embargo es uno de los aspectos menos estudiados en relación al TEA.

¿Qué tan comunes son los problemas de sueño en los niños con autismo?

Un estudio realizado en el 2019 sugiere que el 80% de los niños con autismo en edad pre escolar tienen problemas de sueño. Los problemas de sueño son 2 veces más frecuentes en niños con autismo en comparación con niños típicos o niños con otros transtornos del desarrollo.

¿Qué tipo de problemas de sueño son comunes en Autismo?

Insomnio. Les toma tiempo extra conciliar sueño y muchos despiertan durante la noche.

Algunos tienen apnea del sueño (condición que causa que dejen de respirar en diversos momentos de a noche).

¿Cuáles son las consecuencias de no tener buen descanso?

Existe numerosa evidencia de que muy pocas horas de sueño puede exacerbar algunos retos propios del autismo como por ejemplo los retos en socialización. Niños que duermen mal tienen más severos comportamientos repetitivos y les cuesta más establecer amistad en comparación con otros niños con TEA que no tienen retos de sueño. Asímismo, suelen tener menores puntajes en los test de inteligencia. Es necesario mencionar también que no está claro que la falta de sueño sea la causa o solo un factor más.

Un estudio del 2009 encontró que los niños con autismo que tienen dificultades de sueño tienden a ser más hiperactivos y distraerse más en comparación con los que duermen bien.

¿Por qué las personas con autismo tienen problemas de sueño?

Muchas personas con autismo tienen otras condiciones como problemas gastrointestinales, déficit de atención con hiperactividad, ansiedad y cada una de esas condiciones es conocida por interrumpir el sueño.

El dolor abdominal por estreñimiento, por ejemplo, puede mantener a una persona despierta en la noche. La sensibilidad sensorial a luces, sonidos, texturas puede contribuir a las dificultades en conciliar el sueño. En algunos casos los retos para dormir pueden ser una señal de depresión (en este caso si la depresión es la causa o la consecuencia de la falta de sueño aún no está claro).

Las personas que tienen las condiciones médicas descritas también pueden consumir medicación para sus malestares, medicación que puede afectar el sueño. Por ejemplo, algunos de los medicamentos para hiperactividad con déficit de atención son conocidos por causar insomnio.

Estudios sugieren también que las personas con autismo reportan una mayor probabilidad de mutaciones en los genes relacionados al ciclo de sueño. Los que presentan insomnio pueden, por ejemplo, tener mutaciones que afecten sus niveles de melatonina (hormona natural que afecta el sueño).

Existen tratamientos que ayuden a las personas con autismo a dormir mejor?

Establecer una rutina (secuencia de actividades) puede ayudar a algunos a cociliar el sueño, adicionalmente se puede cambiar la temperatura de la habitación y modificar las luces. En general mantener un horario regular de acostarse y  despertar puede contribuir con un mejor sueño.

Existen adicionalmente medicamentos para tratar el insomnio en adultos pero no en niños. Para niños los suplementos de melatonina pueden ser una buena opción a ser evaluada por su médico.